Dos coches

Dos coches

Entre dos coches
acaso mal estacionados, o bien, o no me importa,
paso apenas, ladeándome,
y alcanzo el otro lado de la calle...
Luis Vicente de Aguinaga

Así es, dos son los autos que hoy estaban aparcados: miércoles, 15:15. El de la izquierda, el oscuro, seguía allí a las 20:00.

Y en la parada del autobus este otro:

Y a las 22:00, esta furgoneta:

Mañana pondré fotos más hermosas, fotos con los colores del otoño. Aun así, estoy segura que habrá autos aparcados encima de la acera.

Licencia para aparcar

Martes, 07:30. Mientras se hace el cafe y tuesto el pan para desayunar, miro por la ventana hacia el monte Larrun, para ver qué tiempo hace. Hara! Otro auto aparcado en la acera. Tiene los cristales empañados, lo que indica que ha pasado todo la noche ahí. He cogido la cámara y le he hecho la foto desde la ventana de la cocina.

Hoy, saldré de casa más tarde que de costumbre, pues iré a trabajar en el auto de mis alumnos. He salido de casa a las 8 y cuarto, y justo en ese momento... el auto de los municipales; como el semáforo se ha puesto en rojo, se ha detenido; al pasar a su lado le he hecho un gesto indicándole a ver si no veía el auto que estaba aparcado en la acera, lo tiene a 2 metros. Me ha mirado con cara de asombro.

He vuelto del trabajo con los alumnos; para las 15:15 estaba en casa. Habitualmente utilizo el tren y llego media hora más tarde. El auto blanco de esta mañana no está, en su lugar hay otros. He entrado en casa, he puesto a calentar la comida y... klik-klak, otra foto.

Desde la ventana de la cocina veo la muralla. La observo con frecuencia, pues me gusta mucho el color que coge la piedra, color amarillento, cálido, ya que a esta hora de la tarde, el sol le da de lleno. Y desde mi ventana tambien veo los autos que estan aparcados, mal aparcados: una gran furgoneta.

Acoso municipal

No puedo denominar de otra manera a la forma de actuar de los municipales conmigo. Me acosan con multas porque en una ocasión, hace seis meses, mientras descargaba material del auto lo dejé aparcado, durante un rato, encima de la acera, al lado de mi portal.
A mí me multan, pero al vecino de arriba que lo deja todos los días no (he hablado con él); al ertzaina que lo deja todos los días tampoco, ni a su mujer, ni a su vecino, ni al dueño de la pastelería Hawai que lo deja todos los dias durante horas, ni a muchos otros vecinos que los dejan durante toda la noche, ni tampoco a quienes aparcan en la parada del autobus. Venid y comprobazlo: a cualquier hora del día podreis ver autos aparcados encima de las acera, del paso cebra, en la parada del autobus, incluso delante de la oficina de los municipales. Ninguno de ellos es multado. Incluso podreís ver a los municipales pasando delante de todos esos coches, haciendo la vista gorda.
¿Por qué me multan unicamente a mí? No hay que pensar demasiado para buscar la razon.