Fui a Falces porque quería hacer fotos del encierro del Pilón. Quería saber como era el lugar, dónde podía dejar el auto, conseguir la acreditación... No había estado nunca. A la entrada del pueblo hay una gasolinera. Habia una pareja conversando; me acerqué y les pregunté si podía acercarme más al pueblo con el auto, y si el Pilón quedaba lejos. "Ya te voy a enseñar dónde es" –me dijo el hombre, Francis–. Se subió a mi auto y me indicó donde aparcar, lo más cerca posible del Pilón. No solo eso: me enseñó el recorrido y fuimos hasta arriba del todo, ¡a pesar del calor!
Al bajar del Pilón vi que estaban haciendo calderete. Me dijo que ese día se celebraba el concurso; nos acercamos a un grupo.
-A esta la llevais luego con vosotros a comer.
Y así acabé comiendo en una bajera con Flor, su familia y sus amigos. "¿Y esta quien es?" –preguntaban los que venían–. "No sabemos, la ha traido Francis" –me entra la risa recordando el momento–.
Fue una tarde muy agradable y el calderete... exquisito! Les hacia gracia que solo comiera las patatas,–soy vegetariana–.
Tenía oído que en los pueblos de la ribera navarra no te sientes extraño, que te acogen con facilidad. Pude comprobar que efectivamente es así.
La verdad Gotzone que estás en todos los lados y te enteras de todo. Seguramente que esa familia tambien estuvieron agusto contigo, porque eres super maja. Esther (Olleta)
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